sábado, 19 de octubre de 2013

Lo que crees de Dios determina qué produces

Introducción
1. “No pienses dos veces en entregar lo que se termina para ganar lo que es eterno”.
2. Esta ha sido la inspiración de muchos hombres y mujeres que han tomado en serio a Dios. Misioneros que se “enterraron” en tribus indígenas para producir un alfabeto y luego una traducción de la Biblia.
3. Tareas que toman 25 o 30 años llevar a cabo. Luego, cuando han terminado ese proyecto, toman proyectos similares en otra parte del mundo.
4. Hace unos 50 años, Jim Elliot, un joven misionero, murió en manos de los Aucas de Ecuador, con otros cinco jóvenes. ¿Por qué esta dispuesto el ser humano a entregar su vida así?
5. La vida cristiana consiste en tomar decisiones. Tomar riesgos calculados por la fe. Hay tareas que nadie más quiere hacer, hay compromisos que nadie mas quiere tomar. ¿Qué se requiere para que gente “normal” se entregue “sobrenaturalmente”?
6. Jesús explica que tiene que ver la idea de Dios en todo esto. Los hombres en días de Jesús creían que su responsabilidad ante Dios era ser religiosos. ¿Hay otras convicciones?
7. En Mateo 25, Jesús cuenta tres parábolas para corregir la idea de que la responsabilidad nuestra se cumple con ser religiosos. Habla de decisiones, de negocios, de dinero y de ganarlo todo o perderlo todo. Veamos Mt. 25:14-30.

I.C. Lo que piensas de Dios determina tu responsabilidad ante él.
Propósito: Exponer que lo que creemos sobre Dios determina si hacemos con nuestras vidas lo que el espera.

I. Lo que pensamos de Dios, se compara a tres hombres que reciben oportunidades diferentes,v.14-18
A. Los talentos como oportunidades para servir, v.14-15
B. Los talentos producen resultados prácticos, v.16-18

II. Lo que pensamos de Dios, determina si producimos los resultados que el espera, v.19-30
A. Los resultados de los primeros dos siervos ilustran el temor práctico, v.19-23
B. Los resultados del tercer hombre ilustran que el temor teórico rechaza el amor evidente, lo cual tiene consecuencias eternas, v.24-30

Conclusión
1. Lo que pensamos de Dios es crucial para reconocer nuestra responsabilidad ante él.
2. Cuando la revisa Times contó la historia de los misioneros muertos en Ecuador dijo: “¿Por qué se gasta así lo mejor de nuestra juventud, por qué van a gente que no los quiere?”.
3. La respuesta está en las palabras que Jim Elliot, una de las víctimas, registró en su diario: “no es necedad entregar lo que no puedes retener, para ganar lo que no puedes perder”.
4. No somos salvos por obras, pero nuestras obras serán calificadas por Dios, para ver si fueron motivadas por al fe o por la vanidad e insensatez del egoísmo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario